Edgar Sanfeliz Botta, contratenor santiaguero
Impresionante historia de éxito
La historia del joven santiaguero Edgar Sanfeliz Botta de 27 años de edad es impresionante, porque parece un personaje sacado de un cuento de hadas.
Tal vez algún guionista de Hollywood pueda tener la tentación de rodar un film sobre el jóven Edgar. No es para menos la increible historia verídica que nos complace especialmente relatar en este Blog, por el gran aprecio que le tenemos y los bonitos recuerdos junto a nosotros en la Orquesta Sinfónica de Oriente.
Allá por el año 2013, el joven protagonista de nuestro relato trabajaba en un restaurante McDonald en Florida, cuando el destino hizo que se cruzara con una anciana señora, directora profesional de coro, llamada Roberta David.
Como de costumbre, esta anciana acudió cierto dia a comprar al establecimiento para comprar algún alimento y descubrió por casualidad el enorme "talento en bruto" de uno de los empleados al escuchar cómo éste cantaba la canción "Once upon a dream", el conocido tema de la película La Bella Durmiente de W. Disney. La señora Roberta quedó tan impactada por la melodiosa voz que le llegaba a sus oidos que le preguntó si era cantante, a lo cual, le respondió que sí y en es preciso momento, la gentil señora decidió hacer todo lo posible por encauzarlo y proyectarlo en Estados Unidos. Cada vez que la señora Roberta acudía al MacDonald preguntaba por el cantante y siempre le dejaba su tarjeta, hasta que un día Roberto la llamó por Navidad del 2013 y a partir de entonces se afianzó una maravillosa relación de amistad entre ambos.
Pasado algún tiempo, el joven, con la ayuda de su benefactora, logró presentarse a una audición para el programa musical de la Universidad Internacional de la Florida ( FIU.) ,otorgándole esta prestigiosa Universidad una beca y en agosto de 2014 comenzó a recibir clases profesionales de canto con la profesora, Kathleen Wilson, la cual dijo que el jóven era un verdadero “diamante en bruto” y que “que va a tener una carrera internacional”.
Transcurrieron tres cursos con excelentes resultados y un aprovechamiento óptimo, llegando a su graduación en la Florida Internacional University. y convirtiéndose ahora en noticia destacada en los medios de comunicación estadounidenses.
Formación musical en Santiago de Cuba
Edgar se había formado musicalmente en su Santiago de Cuba natal, hasta que en diciembre de 2012 partió a Estados Unidos para buscar una carrera musical mejor. Desde entonces no ha vuelto a Cuba.
En Santiago de Cuba había tenido Edgar muy buenos maestros. Estudió dirección coral en el Conservatorio Esteban Salas de Santiago de Cuba y había cantado con las principales agrupaciones corales de la ciudad santiaguera. Se graduó en 2009 y formó parte del prestigioso Orfeón Santiago, participando en diferentes festivales.
Además, aprendió de manera autodidacta a tocar el órganoaprendió a tocarlo leyendo libros en la biblioteca y practicando en una sala de conciertos de Santiago de Cuba y había ejecutado en numerosas ocasiones como vocalista o ejecutando dicho instrumento con la Orquesta Sinfónica de Oriente en el año 2012, dirigida por maestros como Enrique Pérez Mesa, Guido López-Gavilán y Daria Abreu . También había interpretado y cantado como solista conjuntamente con la OSO y con el Orfeón Santiago en la Sala Dolores. Además también fue el organista de la Iglesia de Santa Lucía, su “querida parroquia”. De allí recuerda con cariño al sacerdote y músico Jorge Catasús.
Edgar llegó a actuar para el Papa Benedicto XVI durante la visita del Sumo Pontífice a Cuba en 2012, y también para el presidente cubano Raúl Castro cuando visitaba Santiago.
Los valores humanos y la personalidad de Edgar Sanfeliz
Ineludiblemente, hay que destacar el valor y aspecto humano que atesora este santiaguero de pro, pues una de las prioridades que se había planteado Edgar Sanfeliz era llevar a su familia a Estados Unidos. Para conseguirlo, mientras estudiaba en FIU, trabajó como profesor de canto en una academia de música (academia Conchita Espinosa) ,y como organista y cantante en diferentes Iglesias. También participó conciertos y recitales, y con el dinero reunido, ahorrando todo lo que ganaba, pudo llevar a su familia a los Estados Unidos. Además, el dinero que ha ido consiguiendo lo ha invertido en su hermana gemela, pues actualmente ella está estudiando Fisioterapia en Miami.
Otro valor que destacamos de la personalidad del joven es su humildad y agradecimiento, pues no manifiesta vanidad alguna, a pesar de su éxito; sino que prefiere agradecer la suerte de haber encontrado a Roberta, su providencial benefactora en su camino.
La noticia de la graduación y la entrevista a Edgar Sanfeliz Botto
El diario el Nuevo Herald, entre otros periódicos, y otros medios de comunicación como ONCUBA, han destacado la noticia de la graduación de Edgar Sanfeliz, publicando una emotiva entrevista, de la cual resumimos algunas de sus declaraciones más destacadas:
“Ella ha sido alguien muy especial para mí, es mi abuela americana, dice con gratitud. Tras conocerla mi vida cambió para bien. Me tomó bajo sus alas y me dio el empujón que tanto necesitaba. Aunque ya estaba retirada como músico, sabía de los mejores programas de estudio en Miami y se dedicó a introducirme en el mundo cultural de la ciudad. También me ayudó con el inglés y prácticamente se convirtió en un miembro más de mi familia”, contó Edgar en entrevista con OnCuba.
“Ese programa me proporcionó la mejor educación musical que me hubiera imaginado, asegura. El mundo de posibilidades que me abrió FIU es invaluable, desde el aprendizaje hasta los recursos, partituras, libros, conciertos. Pude perfeccionar mi técnica como cantante y organista, ganar en conocimientos para poder abrirme camino en el futuro. Además, me otorgó un título estadounidense, algo muy importante para trabajar en este país, porque cuando me fui de Cuba no pude llevarme nada, tuve que empezar de cero.”
“Le debo mucho a mi etapa en Cuba porque tuve muy buenos maestros. Estudiar en Santiago me dio las bases, las herramientas, para luego poderme superar y perfeccionar como artista aquí en los Estados Unidos.”
“Cuando iba a Santiago, Raúl me mandaba a buscar para que tocase el órgano. Desde la primera vez que me escuchó quedó encantado. También Frank País tocaba el órgano, ahí estaba la conexión”, supone Edgar.
“Mis planes son seguir cantando y tocando el órgano, como lo he hecho en estos años, asegura. Sé que ahora voy a tener muchas más oportunidades y pienso seguir superándome, hacer un master y un doctorado. Quiero hacer conciertos y óperas, pero también enseñar y terminar mis estudios.”
Edgar dijo también que no sabe si volvería a cantar en su país. “Quizás en Santiago”, conjetura. “Extraño a mis amigos, mi parroquia, mi gente, mi ciudad, pero también hay muchas cosas que me alejan. Cuando salí tuve que renunciar a todo, me hicieron sentir como si estuviera haciendo algo mal, y me pregunto: ¿qué hay de malo con viajar, con buscar nuevos horizontes? Volver a mi país es algo que se lo reservo al destino”.
Al hablar de su carrera musical, Edgar lo resumen de la siguiente manera: “Desde el vientre de mi madre siempre estaba cantando”.
Los planes de futuro más inmediatos pasan por trabajar primero y ampliar sus estudios con un doctorado
Edgar piensa continuar con su formación universitaria —estudiar un doctorado en la Escuela de Música de la Universidad de Indiana— y asegurarse de que su familia esté bien, por lo que este año 2017 dejará los estudios para trabajar, pero con la intención de retomarlos el próximo año.